Compartimos el informe del Encuentro Regional de Pastoral Familiar del NEA llevado a cabo del 3 al 5 de junio en la Diócesis  de Goya, realizado por María Celia y Juan Pérez Campos, Coordinadores Regionales

Durante los días 3, 4 y 5 de junio, en la casa de retiro San Liborio, ubicada en la localidad Mariano I. Loza de la diócesis de Goya (Corrientes), se realizó el Encuentro Regional de Pastoral Familiar del NEA con el lema “Jesucristo, Pan de Vida y Comunión para nuestras familias”.

Estuvieron presentes matrimonios delegados de las arquidiócesis de Resistencia y Corrientes y de las diócesis de San Roque, Goya, Santo Tomé, Iguazú, Oberá y Posadas, con el acompañamiento de los asesores: padre Jorge Ojeda de Corrientes, padre Oscar López de Iguazú y la hermana Graciela Firpo de Goya. También asistieron el Arzobispo de Corrientes y delegado en la región NEA para el área de familia, Monseñor Andrés Stanovnik, y el Obispo de la diócesis anfitriona, Monseñor Adolfo Canecín. En esta ocasión no pudieron concurrir los delegados de las diócesis de Formosa y Reconquista.

 A lo largo de la tarde del viernes 3 fue arribando la mayoría de los participantes, a quienes  Monseñor Adolfo Canecín -de paso hacia una parroquia en la que debía celebrar confirmaciones- sorprendió con una breve pero grata visita.

 Esa tarde fue propicia para charlas informales y amistosas, mientras que cada uno se iba acomodando en el lugar y hasta el momento de la celebración eucarística que presidió el padre Jorge Ojeda. Luego de la cena se entró en clima de reflexión sobre el matrimonio con el video “¿Qué añade el Sacramento?”, que motivó a algunos matrimonios a dar testimonio de vida.

 El día sábado 4 se inició con la oración de la mañana y seguidamente Monseñor Andrés Stanovnik presentó la Exhortación Apostólica “Amoris Laetitia”, señalando que en ella el Papa Francisco asume los aportes de los dos sínodos sobre la familia, las enseñanzas de sus Predecesores e integra también sus propias catequesis sobre la familia. Resaltó que el documento posee un tono positivo, concreto y esperanzador, con un lema que nos interpela: “No solo incluir, sino integrar a todos”. Subrayó que presenta dos grandes preocupaciones del Papa: desarrollar una «pedagogía del amor», que oriente a los jóvenes hacia el matrimonio y estimular el crecimiento del amor de los esposos.

 A continuación hubo un primer espacio para las diócesis y en el que puntualizaron los diferentes servicios que están realizando, presentando las inquietudes ante los diversos desafíos de la actualidad.

Previo al almuerzo, concelebraron la Eucaristía los sacerdotes Jorge Ojeda y Oscar López.

Luego de un breve descanso se informó acerca de la nueva comisión del Secretariado Nacional para la Familia y algunas de sus actividades, en particular la presencia en el Congreso Eucarístico de Tucumán.

 Más tarde, el Obispo de Goya, Monseñor Adolfo Canecín se refirió a “Amoris Laetitia” desde el tema “Actitudes pastorales en el Año de la Misericordia”. Profundizó las propuestas de la Exhortación Apostólica con una amena exposición matizada con variados testimonios de su propia vida. Dejó algunas inquietudes materializadas en preguntas para que se desarrollaran en grupos, lo cual se llevó a cabo después de una pausa.

Siguió un segundo momento de compartir experiencias y proyectos de las diócesis con ideas novedosas. Y luego de la cena -un apetitoso asado- se compartió un momento de diversión en el que se puso de manifiesto la habilidad de algunos participantes para contar chistes, y además se entregaron obsequios recordatorios preparados por la diócesis anfitriona.

 El día domingo 5 se inició con la Eucaristía celebrada por el padre Oscar López. Y luego del desayuno, el matrimonio María Celia y Juan Agustín Pérez Campos, abordó el capítulo sexto de “Amoris Laetitia” para concretar algunos aspectos pastorales, con una exposición intercalada con un conveniente intercambio.

Como última actividad se realizó un plenario en el que los grupos compartieron las reflexiones realizadas el día anterior, que finalizó con el enriquecedor testimonio de un matrimonio en segunda unión que presentó sus experiencias, expectativas y recomendaciones.

Como evaluación los participantes manifestaron que las jornadas resultaron inspiradoras para la lectura y estudio de “La alegría del amor”, y expresaron el compromiso de transmitirla a sus diócesis, enfatizando la necesidad de un cambio de actitud en toda la Iglesia, para poner en práctica sus enseñanzas.

Se destacó la excelente organización efectuada por el equipo de la diócesis de Goya, el acierto en el programa y cumplimiento del mismo, y los momentos permitidos para un encuentro más profundo con Dios tanto personal como comunitario en las misas, adoración al Santísimo y oraciones.

La despedida fue con un afectuoso y cordial almuerzo en el que saboreamos un exquisito mbaipy, típica comida correntina.

Agradecemos a Dios por este bendecido encuentro bajo la protección de María de Itatí, y le pedimos la gracia de la perseverancia en este servicio a las familias.